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sábado, 10 de septiembre de 2022

Pizza de berenjenas, queso de cabra y miel


Ya ha pasado bastante tiempo desde la anterior entrada, más del que tenía previsto, pero ahora con la llegada de septiembre y la vuelta a la rutina, aquí estoy de nuevo con energías renovadas después del parón veraniego.

Para la vuelta he elegido una pizza, y no una pizza cualquiera, la de hoy yo la calificaría como una pizza gourmet. Si sois amantes de la mezcla de sabores dulce-salado os encantará seguro. Para mí desde luego está entre las preferidas. Espero que sea también de vuestro agrado.

Para prepararla necesitaréis los siguientes

Ingredientes:

Para la masa

-240gr. de harina de fuerza
-150ml. de agua
-1 cucharada de aceite de oliva
-1 cucharadita de sal
-12gr. de levadura fresca de panadería (ó ½ sobre de levadura seca de panadería)

Para el relleno

-70gr. de tomate triturado
-1 bola de queso mozzarella
-1 rulo pequeño de queso de cabra (de 250 a 300 gramos)
-1 berenjena
-1 cucharada de miel
-orégano seco y en este caso le añadí también una mezcla de especias especial para pizzas
-aceite de oliva virgen extra para freír la berenjena

Preparación:

En primer lugar preparamos la masa. Yo en esta ocasión la amasé en la thermomix, pare ello echamos el agua, el aceite y la sal en el vaso, y programamos 3 minutos/temperatura 37 grados/velocidad cuchara.

Después añadimos la harina y la levadura, y programamos 3 minutos/función amasar. Una vez transcurrido el amasado, guardamos la masa en un cuenco untado con aceite y tapada con papel film hasta que doble el volumen.

Si tenéis panificadora, también podéis prepara la masa en ella, para ello se echan todos los ingredientes de la masa en la cubeta empezando por el agua, la sal y el aceite, siguiendo por la harina y finalizando con la levadura. Después se selecciona el programa de amasado con fase posterior de levado, que en mi máquina dura 90 minutos (20 de amasado y los restantes de levado), y ya sale la masa lista para darle forma.

A falta de robot de cocina, también se puede amasar perfectamente a mano, para ello añadís a un cuenco amplio la harina tamizada y la sal, luego mezcláis bien y hacéis un hueco en el centro como si se tratase del cráter de un volcán, luego añadís el agua tibia en la cual se habrá diluido previamente la levadura. Seguidamente se va mezclando con la ayuda de una cuchara de madera, y cuando se empiece a formar una bola que se despega de las paredes, seguís amasando a mano en la encimera durante diez minutos. Después dejáis reposar la masa en el mismo cuenco en el que se inició el amasado, tapándolo con papel film hasta que doble el volumen.

Mientras esperamos a que la masa crezca, aprovechamos para cortar la berenjena en rodajas con una mandolina, luego vamos colocando las rodajas en un escurridor de verdura, espolvoreándolas con sal fina, y dejamos reposar durante 30 minutos. Esto se hace para que pierdan parte del agua que contienen, y también el amargor característico. Transcurrido el tiempo de reposo, las lavamos bajo el grifo para sacarle la sal, las escurrimos bien y las secamos sobre papel de cocina, y después las salteamos en una sartén con una pizca de aceite de oliva virgen extra, durante 1 minuto por cada lado. A medida que van estando las berenjenas, las vamos retirando a una fuente y reservamos.

Cuando la masa esté lista, precalentamos el horno a 2500 calor arriba y abajo, y seguidamente procedemos a darle forma a la pizza, para ello estiramos la masa sobre la encimera espolvoreada con una pizca de harina, dándole la forma deseada, en este caso redonda.

A continuación colocamos la masa en la bandeja, y encima extendemos el tomate triturado, sobre él espolvoreamos una pizca de orégano seco. Yo en esta ocasión le añadí también una pizca de especias especial para pizza, pero esto es opcional.

Después añadimos por toda la superficie el queso fresco de mozzarella cortado en trocitos pequeños, y sobre él colocamos alternativamente las berenjenas reservadas y el queso rulo de cabra cortado en rodajas finitas.

Finalmente colocamos la bandeja en la parte de abajo del horno, ¡ojo!, no en la última rejilla, sino en la base misma del horno para que así nos quede una pizza jugosa, pero con una base crujiente que resulta deliciosa. Cuando esté hecha, en mi horno tarda unos 20 a 25 minutos, la retiramos y la colocamos sobre una rejilla para que enfríe un poco antes de servir, si bien nada más salir del horno debemos coger una cucharada de miel, y la dejamos caer en forma de hilo por toda la superficie.

Con esto termino por hoy, dentro de unos días volveré con una nueva receta.

Un abrazo

sábado, 1 de octubre de 2016

Berenjenas fritas con miel de caña


Los que me seguís ya sabéis lo mucho que me gusta la cocina, sobre todo la cocina tradicional. Pues bien, otra de mis grandes pasiones es viajar y conocer la cocina típica de cada región, y la receta que hoy os traigo, berenjenas fritas con miel de caña, conocidas también como berenjenas al estilo mozárabe, porque fueron los árabes los que la introdujeron en la península, son un aperitivo típico del sur de España, más concretamente de Córdoba, donde las sirven como tapa en muchos bares.

La miel de caña o melaza tiene altos porcentajes de hierro, cobre, magnesio y varias vitaminas del complejo B. Procede de los residuos de cristalización final del azúcar, de los cuales ya no se puede obtener más azúcar por métodos físicos.

Se denomina ingenios a las empresas que procesan la caña de azúcar, y en toda Europa solo hay una, y está precisamente en España, en concreto en Málaga, en la localidad de Frigiliana. La empresa es De la Torre S. A., y la miel de caña la comercializa bajo el nombre de Ingenio Nuestra Señora del Carmen. La podéis encontrar en herbolarios, en el Corte Inglés y en el Mercadona.

Os dejo ya con la receta, veréis que fácil es.

Ingredientes:

-2 berenjenas
-1 lata de cerveza
-aceite de oliva para freír
-harina para rebozar
-sal
-miel de caña

Preparación:

Lavamos las berenjenas, las cortamos en bastoncitos o en rodajas como prefiráis, luego las salamos y las dejamos en reposo en un escurridero durante media hora, para que suden y pierdan parte del agua que contienen. Después las pasamos a otro recipiente, las cubrimos con cerveza y las dejamos en reposo otra media hora, (lo de echarle cerveza es para que luego no absorban aceite de la fritura, pero no le da ningún sabor)

Mientras ponemos una sartén con aceite al fuego, y cuando esté caliente, escurrimos las berenjenas de la cerveza, las secamos bien con papel de cocina, y luego las enharinamos, las freímos por ambos lados y las retiramos a un plato sobre papel de cocina para absorber el aceite sobrante. Cuando las tengamos todas fritas, las retiramos a una fuente de servir, echamos por encima unas cucharadas de miel de caña, y servimos aun calientes que es cuando están bien crujientes y cuando mejor sabor tienen. 

Espero que os haya gustado esta rica receta, y los que aun no la conocéis, no dudéis en ponerla en práctica, os sorprenderá seguro :)

lunes, 27 de junio de 2016

Escalivada


Pues aunque ya entramos oficialmente en el verano, la nueva estación para mí vino con un regalo inesperado: la gripe…, o más bien el refriado... Todo sucedió porque con motivo de las hogueras de San Juan nos juntamos los vecinos y cenamos fuera al aire libre, pero aquí en Galicia ya se sabe que el tiempo no es de fiar, ni siquiera en pleno verano..., el caso es que me cogió el frío y el fin de semana estuve prácticamente todo el tiempo en cama.

Hoy me encuentro algo mejor, por lo menos tengo las fuerzas suficientes para ponerme delante del ordenador a redactar una nueva entrada y echar un vistazo a vuestras cocinas, por cierto, disculpadme por estos días de ausencia.

La receta elegida para la entrada de hoy es la escalivada, que es una ensalada de verduras asadas (escalivar significa “asar al rescoldo”), típica de Cataluña, Aragón , Comunidad Valenciana y Región de Murcia. Las verduras pueden variar, aunque las más frecuentes son los pimientos rojos, la cebolla, la berenjena y el tomate.

Se puede servir como acompañamientos de otros platos, o bien como plato único, y también es típico servir la escalivada con unos filetes de anchoa y una tosta de pan como hice yo en esta ocasión. Conviene servirla templada o a temperatura ambiente (no fría) y consumirla el mismo día

Es un plato sencillamente delicioso y muy sano, uno de los exponentes de la dieta mediterránea que tantos beneficios nos aporta, de modo que ahora que estamos en verano y suelen prepararse muchas barbacoas, cuando encendáis las brasas no perdáis la oportunidad de preparar este sabroso plato. 

También se pueden hacer las verduras en el horno, pero personalmente pienso que como las brasas no hay nada porque la verdura queda perfumada de un olor a humo muy agradable.

Os dejo la receta, veréis qué fácil es:

Ingredientes (para 4 personas)

-4 pimientos rojos
-2 berenjenas
-4 cebollas pequeñas
-4 tomates de rama
-2 dientes de ajo
-aceite de oliva virgen extra
-sal
-filetes de anchoa (opcional)
-una gotas de vinagre balsámico de Módena (opcional)

Preparación:

En primer lugar lavamos con esmero la verdura bajo el grifo del agua fría para eliminar restos de impurezas o de pesticidas, luego la secamos con una servilleta de papel y la untamos con aceite de oliva virgen extra. 

Después cuando las brasas estén en su punto ponemos la verdura en la parrilla, y le damos la vuelta de vez en cuando para que se haga por todos los lados. Cuando veamos que las verduras están hechas las retiramos a un cuenco por separado y las dejamos reposar unos 20 minutos. 

Transcurrido ese tiempo retiramos las pieles de la verdura, retiramos también las semillas de los pimientos, y con las manos cortamos tiras, a lo largo, de pimientos, berenjenas, cebollas y tomates, y las vamos colocando alternativamente en la fuente de servir.

Por último ya solo nos queda aliñar las verduras, para ello picamos finamente los ajos, los esparcimos por arriba, salamos, y regamos todo con un buen chorro de aceite de oliva virgen extra.

Yo por gustos personales suelo echarle también unas gotas (muy pocas) de vinagre balsámico de Módena, y en este caso acompañé también la escalivada con unos filetes de anchoa, algo que por otro lado es muy típico.

Como veis no tiene ninguna complicación, y os aseguro que está riquísima, de hecho huele que alimenta :-)